25 grados

Se estremece mi cuerpo, tiembla cada poro de mi piel provocando que cada pequeño vello que hay en mi decida darme una indicación, llaman mi atención y se estiran todos a la vez. Ya veo que estaís ahí.

Las uñas de mis manos se emblanquecen, languidecen mis dedos en una firme decisión de congregarse.  Un pequeño espasmo recorre todo mi ser.

Mis pies han decidido apretarse firmemente a las suelas de sus zapatos, se entrecruzan entre ellos a la altura de los tobillos, intentando que el calor que aún queda en la sangre decida fluir piernas arriba.

Mis manos me abrazan y acarician dulcemente, tocando todo el contorno de mis brazos, agradecidos intentan entrelazarse en el torso, uniéndose en el centro de mi cuerpo.

Mi pelo largo decide colaborar y ampliar su textura sobre mis hombros, una cálida y suave capa para aminorar los efectos del FRIO.

Si, si, Frio, estoy helada con tanto aire acondicionado!!!

¿Aún no sabeis que hay q ponerlo a más de 25 grados?? Y por cierto, las mujeres tenemos un grado menos de temperatura en el cuerpo (me parece que yo debo de tener algunos menos) así que mínimo 26 por favor  😉